Hoy he almorzado en la Escuela de Hostelería de Cádiz que está en la Alameda Marqués de Comillas. Se están celebrando las XV Jornadas Gastronómicas de Productos Gaditanos con un Menú Degustación. Se celebran desde hoy hasta el viernes 22. El menú consta de dos entrantes fríos, dos entrantes calientes, pescado, carne y postre. En todos los casos se puede elegir entre dos platos.
No voy a hacer más comentario que decir que TODO estaba buenísimo, los productos son de calidad, la elaboración muy cuidada, la presentación esmerada…Y como una imágen vale más que mil palabras, aquí van las fotos.
Tartar de atún con mostaza al oloroso dulce y tostas de girasol y sésamo (que no se ven en la foto, estaban en una cestita.
Huevo a baja temperatura con habitas tiernas y jamón ibérico
Garbanzos con mejillones y espinacas
Arroz meloso de carrillada ibérica, setas y queso de cabra
Para beber elegimos un rosado que me gusta mucho, Barba Rosa, de Arcos de la Frontera. Con el postre Pedro Ximénez.
Lubina rellena de berenjenas al ajillo con mojama y crema de cebolla dulce. También se podía elegir Rape glaseado con emulsión al azafrán y patatas confitadas al pimentón.
Jarrete glaseado al Tinto Samaruco y arroz especiado al curry
Solomillo de ternera salteado al Ponche con bastoncitos de boniato frito
Tocino de cielo al Oloroso, helado de caramelo y espuma de arroz con leche
Postre crujiente de piñones (tapado por la bola de helado) y miel de la Sierra. Este crujiente se parecía a la baklava.
Y con el café Petit Fours variados
Como podéis ver, un festín en toda regla. Su precio es 38 euros que, aunque no es barato, tampoco es caro. Viendo lo que cobran en algunos bares por dos cervezas y dos tapas normalitas, comparativamente no es caro. A mí me ha gustado mucho, a lo que se une la experiencia siempre agradable de ser atendida por los atentos y simpáticos alumnos de la Escuela.
Esta Escuela es genial, tanto en servicio, en calidad y en profesionalidad. Estuvimos el año pasado con unos familiares venidos del extranjero y salimos todos contentísimos.
Tienes razón, Charo y, como los que te sirven son los alumnos que están aprendiendo, seguidos muy de cerca por los maitres que no les quitan ojo y les enseñan, pues el trato, el servicio, todo es esmeradísimo. Y la cocina igual, los profesores son magníficos, yo iba a los cursos que daban para gente de la calle, me encantaban. Una pena que los quitaran, porque aprendí mucho y lo pasaba estupendamente, con Juan Ramón González Higuero y Auxi Moreno, que son los que me dieron “clase”.
Muy buen reportaje, Lola.
Gracias!