Estas crepes se hacen en un rato, con ingredientes que solemos tener en casa y una buena sartén que no se pegue.
Qué necesitamos:
Para las crepes (salen 3 grandes o 4 medianas):
- Un vaso de leche
- Un vaso de harina
- Un huevo
- Mantequilla
Para el relleno:
- Unos champiñones
- Media cebolla
- Un pimiento verde grande o dos pequeños
- Tres quesitos en porciones
Cómo se hacen:
En primer lugar hacemos el relleno. Cortamos los champiñones en láminas, y la cebolla y los pimientos en trocitos pequeños.
En una sartén echamos un poco de aceite y refreimos estos ingrediantes picados.
Cuando estén refritos añadimos los quesitos y mezclamos bien hasta que se derritan y mezcle bien todo. Se reserva calentito.
Ahora vamos haciendo las crepes. Mezclamos en un cuenco los ingredientes. En una sartén que no se pegue ponemos una cucharadita de mantequilla y la derretimos al fuego, extendiéndola por toda la superficie.
Echamos parte de la mezcla de forma que cubra la superficie pero quede fina. Cuando notemos que ya está hecha por una cara le damos la vuelta y dejamos que se haga por el otro lado.
La sacamos con cuidado de no romperla en un plato. Así todas las crepes que nos salgan con la mezcla.
Le ponemos el relleno y le damos la vuelta para que quede como un paquetito. Listo. Están muy buenas.
Aún no he hecho crepes. Gracias por la receta.
Pues anímate, Charo, son muy fáciles de hacer y se pueden rellenar de muchas cositas buenas.