Las pizzas se han convertido en una de las opciones más comunes a a hora de tomar algo rápido, rico y nutritivo. Y digo nutritivo porque no me refiero a la forma de tomar pizzas de los americanos, que vemos en las películas que para solucionar un almuerzo o cena piden pizza que la mayoría de las veces tienen muy mala pinta. me refiero a pedirla a establecimientos artesanos como Confusione en Cádiz, por poner solo un ejemplo de cómo se hacen pizzas de categoría.
Pero para mi que me gusta tanto la cocina y hacer los platos en casa, hacer pizza en casa es la mejor opción. Hacer la masa no es difícil, además es muy entretenido, y rellenarla con los ingredientes que más nos gusten es lo más idóneo. En este blog tenéis varias opciones para hacer pizzas, aprovechando lo que tengamos en el frigorífico y la despensa, añadiendo, quitando, probando…
Qué necesitamos:
Para hacer la masa os remito en enlace de cómo hacer pizza en casa de forma rápida y fácil.
Para el relleno:
- Tomate triturado
- Sobrasada
- Uno o dos calabacines
- Queso del tipo que nos guste
- Orégano
Cómo se hace:
Hacemos la masa según se indica en el enlace anterior, la estiramos en forma de rectángulo o de círculo, según la queramos.
Lavamos y cortamos el calabacín en rodajas finas.
Cubrimos la pizza con tomate que esté al punto de sal que nos guste, ponemos encima trocitos de sobrasada y las rodajas de calabacín.
Echamos por encima queso y un poco de orégano.
Calentamos el horno a 180º y, una vez caliente, metemos la pizza, hasta que veamos que la masa está hecha. Se habrá derretido el queso y la sobrasada, mezclándose con el resto y quedando una pizza riquísima y fácil de hacer.
