Hace tiempo publiqué una receta de las famosas y gaditanas tortillitas de camarones, muy ricas y sabrosas, pero con medidas muy grandes que no es lo habitual. Lo más normal es comprar un vaso de camarones en el mercado, y para ello necesitamos menos harina, como en la receta que pongo a continuación. En esta nueva receta nos adaptamos a los vasitos de camarones crudos que venden en los mercados, generalmente en las puertas de los mismos.

Qué necesitamos:
- Un vaso de camarones crudos
- Medio vaso de agua de harina de garbanzos
- Medio vaso de agua de harina de trigo
- Un cuarto de cebolla
- Perejil picado
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
Cómo las hacemos:
Para la harina podemos usar el mismo vaso, llenando la mitad con la harina de garbanzo y completando con la de trigo hasta llenarlo.
En un cuenco grande echamos los camarones, la cebolla y el perejil muy picaditos y las harinas. Mezclamos bien.
Añadimos agua poco a poco hasta formar una pasta homogénea y más líquida que espesa. Esto es muy importante, pues si la masa queda espesa las tortillitas no saldrán finas y crujientes. Añadimos sal para que queden sabrosas pero no saladas.
Ponemos aceite a calentar en una sartén y, cuando esté muy caliente, vamos echando porciones de masa con la ayuda de una cuchara, con la que extenderemos la masa al echarla, para que quede suelta. Cuando estén bien fritas por una cara les damos la vuelta para que se frían por la otra.

El aceite debe estar siempre muy caliente, para que no se «empapen» del mismo. Conforme las vamos sacando las ponemos en un plato con papel de cocina, para que escurran bien, o en otro sistema de escurrir. Cuando ya estén fritas todas no queda más que disfrutarlas…Están riquísimas.