hay muchos motivos para incluir las judías verdes en nuestros platos, tienen pocas calorías, aportan vitamina C y son antioxidantes, tienen mucha fibra y, además, están buenísimas cocinadas de diversas maneras, en ensalada, con tomate frito, en guiso, en revueltos…
Cuando compremos judías verdes debemos asegurarnos de que están frescas, para ello doblamos una y si se rompe es que lo están, si se dobla sin romperse ya no lo están tanto. Otra cosa a tener en cuenta es que a la hora de cocinarlas tenemos que quitarles los hilos laterales, sobre todo a las planas.
En la provincia de Cádiz tenemos unas huertas buenísimas, que nos proporcionan productos de gran calidad, como las judías verdes y los tomates, así que hoy hemos hecho esta ensalada con ambos productos, muy apropiada para el verano.
Qué necesitamos:
- Un cuarto kilo de judías verdes frescas
- Uno o dos tomates según tamaño
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
- Vinagre de Jerez
Cómo se hace:
Quitamos los hilos laterales de las judías y las cortamos en trocitos de unos dos o tres centímetros. Cortamos el tomate en rodajas y éstas a su vez en varios trozos.
Aliñamos echando primero la sal, luego el vinagre y, por último, el aceite. Riquísima ensalada, se puede añadir cebolla, pero solo así está buenísima.