Siempre había pensado que hacer cabello de ángel era difícil, y mi sorpresa ha sido enorme al ver lo fácil que es. Y está tan bueno…se pueden hacer muchas recetas con él pero en esta ocasión tenía obleas de empanadilla que las había comprado en Argendarte, puesto del Rincón Gastronómico del Mercado de Cádiz donde se compran unas empanadillas criollas para chuparse los dedos.
Qué necesitamos:
- Una calabaza de sidra
- Azúcar blanca
- Obleas de empanadillas
- Un palo de canela
- Un trozo de cáscara de limón
- Un huevo para pintarlas
- Azúcar mezclada con canela (optativo)
Cómo se hace:
Se corta en trozos la calabaza de sidra y se ponen a cocer en una olla con agua.
Cuando la pulpa esté tierna se escurre en un colador.
Una vez frío quitamos la pulpa y tiramos la corteza. Pesamos aquella y cogemos el mismo peso de azúcar. Es decir que debemos tener el mismo peso de azúcar que el de la pulpa de la calabaza.
Ponemos a cocer agua con el azúcar, la canela y el limón para hacer un almíbar, y añadimos la pulpa hasta que quede en el punto del cabello de ángel, acaramelado.
Una vez frío lo guardamos en el frigorífico y lo usamos para lo que queramos.
Como he dicho antes, en esta ocasión lo he usado para hacer empanadillas.
Para hacerlas ponemos en cada oblea un poco de cabello de ángel, las doblamos y cerramos con un tenedor.
Las pintamos con huevo batido en la cara superior.
Calentamos el horno a 200º y horneamos las empanadillas hasta que estén doradas, unos 15 minutos.
Las podemos tomar así o echándoles por encima una mezcla de azúcar y canela molida, como en esta ocasión. ¡¡Buen provecho!!
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