Hasta hace poco tiempo no solíamos cocinar y tomar risotto, ha sido desde hace unos años cuando en España hemos ido introduciendo este plato italiano. Es tradicional de la gastronomía italiana y ya está muy extendida por todo el mundo. El risotto lleva como principal ingrediente el arroz y, añadido, el queso parmesano. La mezcla de ambos dan como resultado la característica textura y peculiar sabor. Se puede tomar con verduras, gambas, setas, carne…
Yo he usado como complemento restos que habían sobrado de solomillo con su salsa, que le ha dado muy buen sabor. Es una buena forma de aprovechar restos de carne que nos haya sobrado de una comida anterior.
Qué necesitamos:
- Restos de carne guisada que nos haya sobrado
- Una taza de arroz por persona
- Dos dientes de ajo
- Aceite de oliva
- Queso parmesano rallado
- Sal
Cómo se hace:
Como la carne ya está hecha me remito a su receta, o a sus recetas pues se puede hacer de varias formas. Desmenuzamos o cortamos en trocitos.
En una olla o cazo grande refreímos los ajos picados y después el arroz. Echamos agua y sal y lo cocemos. Una vez cocido lo colamos quitando el agua sobrante.
En una cazuela echamos el arroz y lo mezclamos con la carne y la salsa de ésta.
Lo dejamos hacer unos minutos, pocos pues ya está hecho.
Echamos por encima el queso parmesano y mezclamos bien hasta que se derrita, quedando un arroz muy cremoso.
La cantidad de queso dependerá de la cantidad de arroz usado, pero debe ser bastante para que consiga la cremosidad característica.
Pingback: Risotto con pollo a la parmesana | La fritada